lunes, 10 de mayo de 2010

Más Dinámica Perversa

El siguiente paso era difundir el rumor de que yo trabajaba mal y que dejaba los análisis de los pacientes sin acabar y, por tanto, sin entregar. ¡Como si yo no hubiera llevado sola un laboratorio durante 17 años sin ningún problema!
Primero, tenía que integrar el rumor en la estructura mental de mis compañeros, para que éstos se lo creyeran de verdad. Después, lo tenía que integrar en la mente del resto de los trabajadores del hospital. Para eso, tendría que emplear algunos trucos, pues no bastaba con decirlo de palabra; tenían que poderlo constatar todo el personal del laboratorio, los médicos y la dirección del hospital.

Empezó diciendo a todos mis compañeros que yo dejaba muchos análisis sin validar y que se quedaban muchos resultados sin entregar. Validar significa poner una "V" (dar el visto bueno) en el ordenador, para poder imprimir los resultados y entregarlos a los médicos. En ese año, por problemas en el sistema informático, a todos los analistas nos quedaban resultados sin validar; pero según el jefe sólo me pasaba a mí.

A la dinámica del jefe se apuntó su brazo izquierdo. Ella también me acusó de no validar los resultados. Incluso un día me chilló como una energúmena, diciéndome que por mi culpa no podían salir sus resultados. Cuando le dije que no tenía ningún derecho a chillarme, me dijo ¡Que ella me chillaba si le daba la gana!.

El siguiente paso era intentar que la Dirección del Hospital se creyera que yo trabajaba mal y, de paso, intentar convencerme a mí también de ello.

No hay comentarios:

Publicar un comentario